La evidencia emergente sugiere que el ascorbato, la forma dominante de vitamina C en condiciones fisiológicas de pH, influye en la actividad del genoma mediante la regulación de los procesos epigenómicos.
El ascorbato sirve como cofactor para las dioxigenasas de translocación de diez once (TET) que catalizan la oxidación de 5-metilcitosina (5mC) en 5-hidroximetilcitosina (5hmC), y luego en 5-formilcitosina (5fC) y en 5-carboxilcitosina (5caC) , que finalmente son reemplazados por citosina no modificada. Las histona desmetilasas que contienen dominios Jumonji C (JmjC) también requieren ascorbato como cofactor para la desmetilación de histonas. Por lo tanto, al participar principalmente en la desmetilación de ADN e histonas, el ascorbato parece ser un mediador de la interfaz entre el genoma y el medio ambiente. Además, el estado redox tiene un profundo impacto en la biodisponibilidad del ascorbato en el núcleo. Para cerrar la brecha entre la biología redox y la genómica, sugerimos un campo de investigación interdisciplinario que puede denominarse genómica redox para estudiar procesos redox dinámicos en salud y enfermedades. Esta revisión examina la evidencia y el posible mecanismo molecular del ascorbato en la desmetilación del genoma, y destaca los posibles roles epigenéticos del ascorbato en diversas enfermedades.