Más allá de los efectos bien conocidos sobre la presión arterial (PA) de los enfoques dietéticos para detener la hipertensión (DASH) y las dietas mediterráneas, una gran cantidad de estudios ha investigado el posible efecto de disminución de la PA de diferentes suplementos dietéticos y nutracéuticos, la mayor parte de siendo ellos agentes antioxidantes con un alto perfil de tolerabilidad y seguridad. En particular, un cuerpo de evidencia relativamente grande apoya el uso de potasio, L-arginina, vitamina C, flavonoides de cacao, jugo de remolacha, coenzima Q10, melatonina de liberación controlada y extracto de ajo añejo.
Sin embargo, existe una necesidad de datos sobre la seguridad a largo plazo de una gran parte de los productos discutidos anteriormente. Además, es aconsejable realizar más investigaciones clínicas para identificar entre los nutracéuticos activos disponibles aquellos con la mejor relación costo-efectividad y riesgo-beneficio para un gran uso en la población general con bajo riesgo cardiovascular agregado relacionado con hipertensión no complicada.